El huevo pasteurizado o huevina no deja de ser un huevo fresco sometido a un proceso sanitario mediante un tratamiento térmico sin alterar su estructura, características y calidad. El proceso para obtener huevo pasteurizado es sencillo: se eleva la temperatura del huevo a unos 75ºC aproximadamente y posteriormente se enfría a 3ºC. Esto permite eliminar cualquier germen perjudicial.
Por norma general, el del huevo pasteurizado es un tratamiento que se suele aplicar a productos de estructura líquida. En resumen, la pasteurización ha mejorado la calidad de vida y la seguridad alimentaria, al hacer posible que productos naturales básicos como los huevos se pudieran conservar, preparar y transportar largas distancias sin ser afectados por la descomposición.
Sobre todo con la llegada del calor, el peligro de salmonelosis aumenta y, gracias al huevo pasteurizado, podemos disfrutar en nuestros bares, de deliciosos y frescos platos de huevos rellenos, mayonesas, tortillas, cremas pasteleras, huevos revueltos etc. Los huevos pasteurizados evitan malas experiencias e intoxicaciones alimentarias innecesarias.
La utilización de huevos pasteurizados ya es de uso obligatorio para la restauración, por ello, decidimos incluir a nuestro catálogo 4 variedades que nos ofrece Eurovo para el canal horeca, desde la ALBÚMINA (clara de huevo pasteurizada) con 32 claras en 1 litro, pasando por el TUORLO (yema de huevo pasteurizada) con 55 yemas por litro, hasta los mix de clara de huevo pasteurizada y huevo pasteurizado, un MIX de color más intenso, elaborado con yemas seleccionadas de gallina de corral. Este último, es ideal para la elaboración de pasta fresca y un MIX de clara y yema para la elaboración de tortillas… en ambos casos 20 huevos por litro.
Eurovo garantiza excelentes productos tanto para pastelería como para la preparación de recetas en cocina.